Construido por Titus Crijnen en 2017, copia de un clave de Giovanni Battista Giusti, de construcción ligera y acabado en color negro. Decoración elaborada y basada en un original por Elisa Felipe.
Tiene un característico sonido mordiente, inmediato, casi percusivo, muy apto para la música italiana y muy adecuado para el acompañamiento del bajo continuo. La prontitud del ataque de la nota es una ayuda para los demás instrumentistas llevados por el clave.
